Aquí una vez más actualizando mi blog (aunque a veces, por lo general, no tan dichoso): mientras semana a semana los temas de la vida diaria van desfilando y mutando a nivel frenético por las millones de pantallas sea del dispositivo y/o aparato digitalizado que sea, día a día parece salir ese nuevo gran tema que eclipsa a lo que se venía hablando a los gritos hasta horas antes, fenómeno que a más de uno/a le provoca la sensación de que la única alternativa que le quedaría al común de los/as mortales es la de salir desesperados/as a los alaridos, corriendo despavoridos/as y sin saber bien hacia qué dirección… en fin, mientras pasa todo eso que pasa, por mi parte y más allá de los sinsabores de las situaciones que me toca sobrellevar, aquí me tienen una vez más ya que, así y todo, sigo con esto del dibujo o al menos hago el intento. Basta de tanta cháchara virtual y vayamos a lo que realmente nos compete.
En esta oportunidad, siguiendo con esa tanda de ilustraciones dedicadas a personajes varios, ya sean de historietas/series/películas, que vengo realizando desde hace un tiempo, acá vengo con uno pendiente que corría el riesgo de terminar traspapelado. Como podrán ver, esta ilustración no es otra cosa que una “versión personal” (si se permite la denominación) de la clásica portada al Libro II de la famosa y trascendental saga The Dark Knight Returns del año 1986, con guión y dibujos del laureado Frank Miller, siendo responsable de la ilustración original en la que está basada esta ilustración, la cual hacía tiempo estaba deseoso de hacer…
Ilustración en Hoja A4 – Lápices HB2 + 2B – Entintada con Estilógrafos 0.1 + 0.5 (la versión en lápices se las debo pues se me pasó en alto sacarle foto; en su lugar, para compensar, pongo esta versión intermedia a medio entintar)
Finalmente la misma ha sido coloreada con Lápices Faber Castell
Bueno, tras cierto debate interno entre colorearla a la vieja usanza o mandarle color digital, estuve un tanto tentado en esta segunda opción pero al final opté por dejar de lado los eficaces beneficios y potenciales bondades de lo tecnológico para una vez más darle una vez una oportunidad a lo tradicional, sobre todo en un tiempo en donde todo parece correr serio riesgo de ser fagocitado por lo artificial, lo computado, lo digitalizado.
Bien, es todo por el momento, mientras sigo con esas otras ilustraciones pendientes a medio camino y de las cuales ya fui compartiendo adelantos a través de otros medios tales como las redes (cada vez más menos) sociales. Tal vez la próxima, si no tengo inconvenientes con la PC, le dé oportunidad al color digital desde cero pues una de las ilustraciones ha sido pensada con ese fin, pero como suelo decir: veremos.
No me queda más que ir despidiéndome: hasta una futura entrada (espero que la haya) anónim@s internaut@s del otro lado de la pantalla, estén donde estén.