MUESTRAS DE VIDA (MEJOR DICHO "SUPERVIVENCIA")

     Aquí una vez más actualizando este blog: más que actualizarlo, en este caso y teniendo en cuenta el tiempo trascurrido desde la última entrada, sería revivir (casi directamente resucitar) este blog. Para justificar esta repentina ausencia sin aviso en este recóndito espacio virtual, en el contexto que nos toca sobrellevar tanto a mí como a millones de otras tantas personas en estas tierras sudacas, no alcanzaría con solo decir “me quedé sin internet” y/o “ando sin un mango”. Desde hace casi 6 meses venimos sufriendo a duras penas una auténtica prueba de supervivencia: la de vivir (mejor dicho “sobrevivir”) el día a día como parte del “Ajuste más grande de la Historia de la Humanidad”, como se jacta en llamarlo el mismísimo actual Primer Mandatario (por no llamarlo “Tirano Libertario”) con la desfachatez tan bravucona como repelente (por lo menos para mi parecer) que tanto lo caracteriza.

    Toda una vorágine desenfrenada de sucesos inéditos dignos de una grotesca sátira politiquera surrealista se han venido sucediendo, mucho ha incidido fuertemente en esta repentina ausencia sin aviso de parte de quién escribe las presentes líneas: ya no sabemos de donde ajustarnos pues, por nombrar apenas un ejemplo pequeño pero concluyente, el simple hecho de pagarse el “bondi” (ómnibus) para ir a buscar un trabajo que no aparece por ningún lado era una “fiesta que se tenía que terminar” (según palabras de aquellas personas que aún defienden con ceguera y obstinación este Régimen). Una práctica tan accesible, sencilla y sobre todo esencial para el desenvolvimiento de todos los días como es la de viajar en transporte público se convirtió en un doloroso gravamen por no decir un lujo para unos/as pocos/as, así como cada vez más gente empobrecida abarrotan los comedores comunitarios mientras toneladas de comida se pudren en depósitos so pretexto de que, según informes elaborados por ese mismo Gobierno Libertario, hay “comedores truchos”. Se hablan, se contestan, se felicitan y se tiran flores ellos mismos en medio de una fiesta que más bien es un bacanal obsceno y en la cual el común de la gente de los/as gobernados/as no están invitados/as…

    Aunque, parafraseando esa mítica letra que el Indio Solari le escribiera a Luca Prodan, “mejor no (seguir hablando) de ciertas cosas”. En este mísero rincón varado en la inmensidad internáutica me permito soltar cada tanto palabras como las precedentes, este espacio es mío y dentro de lo que puedo hago lo que quiero: en esta ocasión, eso que quiero resultó ser el de lanzar un discurso de esta índole; no me basta en estos tiempos, con la cantidad y calidad de sucesos actuales que nos atraviesan, con decir “me quedé sin Internet” y ”ando sin un mango”, cualquier/a lector/a que sigue este blog ya sabe muy bien que suelo andar en esa situación. Dicha situación se ha pronunciado y agravado tanto para mí como para millones de personas, derivado de ese rumbo político-social-económico elegido por poco más de 14 millones de personas el pasado noviembre de 2023, una elección que se ve no fue ni muy pensada ni muy consciente y por ende no muy responsable.

    Así vengo a dar muestras de vida (mejor dicho “supervivencia”) con esta entrada de fines del mes de mayo de 2024, donde el texto prima sobre la foto que ilustra la misma, en la cual vemos algunos de los dibujos que fui haciendo en estos días en los cuales no he tenido conexión. A continuación pasaré a postear en la siguiente entrada una nueva ilustración, la cual podríamos decir que en gran medida, justamente, es fruto de estos tiempos por los que estamos transitando...